El sábado cerramos el segundo ciclo de seminarios del Estudio de Hackeos de la Academia, que habíamos llamado, ‘Sacar la Crítica a Paseo‘. Paso a paso, paseo a paseo, nuestro propósito había sido aprender otros modos que el académico de hacer teoría crítica de la ciudad. Para cerrar el ciclo, por tanto, nos preguntamos si acaso no debíamos radicalizar el gesto, y una vez puestos a sacar la crítica a paseo, quizás no aprovechar para desatarla del todo: encontrar un modo de que la Crítica anduviese solita por la ciudad.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Y es así, pues, que el sábado, de la mano de un maravilloso regalo-exposición de Lagaleriademagdalena, la Crítica se soltó del todo. Las magdalenas nos ayudaron a desatar a la Crítica de sus paseos de aprendizajes urbanos, regalándole a la ciudad todo un kit de supervivencia en el espacio público.

¡La Crítica está hoy más fuerte que nunca!

Os dejo con algunas fotos del regalo urbano que la Crítica se hizo a sí misma para con la ciudad el sábado. Y abajo, también, algunas fotos de la Crítica desempaquetándose.